Querida Mónica:
Hemos recibido con mucho dolor la triste noticia. Nora se ha ido, pero nos ha dejado profundas y grandes enseñanzas. Recordaremos su fuerza, su tesón, su deseo decidido para que el psicoanálisis siga existiendo.
Nos contagió a muchos con su deseo, y con su causa que hoy es nuestra.
A cada uno de ustedes en Guayaquil un fuerte abrazo en estos momentos.
Laura Arciniegas