Si bien para muchos el fin de la vida es la reproducción de la especie para otros es dejar un legado. Considero personalmente que dentro de este legado, el cual generalmente uno no espera dejarlo, se encuentra algo del trascender.
Nora Guerrero de Medina fue mi Maestra en la Universidad, durante mi último año en la carrera en el año 2007. Fue mi Directora y Maestra en la Maestría y finalmente supervisé algunos casos con ella en algún momento durante mi vida profesional. Sin lugar a dudas, es una pérdida muy sentida por nuestra escuela, por el Psicoanálisis en Ecuador, y en el mundo.
Tenía una facilidad por la transmisión del Psicoanálisis, con un temple en sus convicciones y con una voz que nos hará mucha falta en la escuela. Si bien su presencia física no estará más con nosotros tengo la seguridad que su voz, su opinión, su temple ha trascendido y vivirá con nosotros y en nuestra escuela.