BOLETÍN # 18 “VIOLENCIAS Y PASIONES”

ix jornadas nel

Con este escrito de Mayra de Hanze que nos trae líneas escogidas en relatos de Roberto Bolaño hablando con su magnífico estilo, de terror, de soledad, de muerte, de rabia y violencia, llegamos al último boletín. 

Terminó el tiempo preparatorio, y estamos listos para recibir en Guayaquil a nuestros invitados y asistentes a las IX Jornadas de la Nel.

Las violencias, las pasiones, en plural, múltiples, han sido abordadas desde distintas percepciones, de la sociología, la literatura, la pintura, la clínica psicoanalítica, la arquitectura, en la amplitud de los escenarios públicos, históricos, o en lo privado cotidiano, hasta lo testimonial, a través  de las singulares reflexiones de quienes se han sumado con entusiasmo y generosidad a nuestro estudio del tema de las Jornadas, haciendo visible la presencia de la violencia en los diversos aspectos de la convivencia humana.

Llegamos a este punto complacidos de los vínculos que el boletín ha suscitado. Gracias y nuestro afecto a cada uno, colaboradores y lectores, que hicieron posible la realización del boletín preparatorio a las IX Jornadas.

Ana Ricaurte

Amberes

Amberes es el nombre de un libro de relatos de Roberto Bolaño pero también es el nombre de una ciudad, la segunda más importante de Bruselas. Su nombre encierra una leyenda de violencia; Hace muchos años en Amberes vivía un gigante llamado Druoon Antigoon, habitaba el castillo Het Steen que queda a orillas del río Escalda. Todas las personas que venían en barco a la ciudad debían pagarle al gigante, sino lo hacían, Antigoon le cortaba la mano y la tiraba al río.

Del imperio romano, mandaron a un centurión, Silvio Brabo, este pequeño venció al gigante, le cortó la mano y la lanzó al río.

El nombre de la ciudad Amberes es Antwerpen en flamenco, y significa lanzar la mano. La mano del gigante es símbolo de Amberes, la vemos por todas partes, especialmente en chocolates y galletas  

Pero Roberto Bolaño nos dice:

Escribí este libro, Amberes, para mí mismo, y ni de eso estoy  muy seguro. Durante mucho tiempo sólo fueron páginas sueltas que releía y tal vez corregía convencido de que no tenía tiempo. ¿Pero tiempo para qué? Era incapaz de explicarlo con precisión. Escribí este libro para los fantasmas, que son los únicos que  tienen tiempo porque están fuera del tiempo. Después de la  última relectura (ahora mismo) me doy cuenta de que no sólo el tiempo importa, de que no sólo el tiempo es motivo de terror. También el placer puede aterrorizar, también el valor puede aterrorizar.

Por supuesto, nunca llevé esta novela a ninguna editorial. Me hubieran cerrado la puerta en las narices y habría perdido una copia. Ni siquiera la pasé, como se suele decir, a limpio. El manuscrito original tiene más páginas: el texto tendía a multiplicarse y a reproducirse como una enfermedad. Mi enfermedad, entonces, era el orgullo, la rabia y la violencia. Estas cosas (rabia, violencia) agotan y yo me pasaba los días inútilmente cansado. Por las noches trabajaba. Durante el día escribía y leía. No dormía nunca… Me mantenía despierto tomando café y fumando.

 Fragmento del relato 28- Un lugar vacío cerca de aquí

Tenía los bigotes blancos o grises…<<Pensaba en mi situación, de nuevo estaba solo y trataba de entenderlo>>…<<Sé que hay un lugar vacío cerca aquí, pero no sé dónde>>…

Fragmento del relato 33- La pelirroja

…Sus ojos eran fríos, a veces aparece en mis pesadillas, sentada en la sala de espera de una estación de autobuses. La soledad es una vertiente del egoísmo natural del ser humano. La persona amada un buen día te dirá que no te ama y no entenderás nada. Eso me pasó a mí. Hubiera querido que me explicara qué debía hacer para soportar su ausencia. No dijo nada. Sólo sobreviven los inventores. En mi sueño un vagabundo viejo y flaco aborda al policía para pedirle fuego. Al meter la mano en el bolsillo para sacar el encendedor el vagabundo le ensartó una navaja. El poli cayó sin emitir ruido… La pelirroja se aleja arrastrando su moto por una avenida arbolada…<<Asquerosamente inmóvil>>…<<Le dice a la niebla: todo está bien, me quedo contigo>>…

Fragmento del relato 38- La pistola en la boca

…La guerra la he tenido en mí mismo desde hace tiempo, de ahí que no me afecte interiormenteescribió Klee… ¿Era Gaspar el que contaba historias de policías y ladrones?  Le pusieron la pistola en la boca y con los dedos le taparon la nariz…Tuvo que abrir la boca para respirar y entonces empujaron el cañón hacia adentro…En el centro del telón negro hay un círculo rojo…Creo que el tipo dijo mierda o mamá, no sé…

Compiladora

Mayra de Hanze

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