Boletín 0: II Jornadas de la Nel Guayaquil – De los abusos al abuso: tratamientos en psicoanálisis
ARGUMENTO
Cuando la causa no está presente, los efectos danzan: fue un modo de advertir la declinación del Nombre del Padre, en la medida en que el crepúsculo del Otro anuncia ruidosamente la proliferación del sentido.
Negri y Hardt, citados por Laurent, nos recuerdan que la civilización es perfectamente compatible con el caos a partir de la ausencia de límite. Cuando se anuncia el crepúsculo del deber tenemos los abusos generalizados. (1)
Con la particularidad de lo que Baumann nos presenta como adiáforas, que es esa cierta indiferencia, ese cierto enfriamiento ético hacia el sufrimiento de las otras personas. Simplemente se elimina la relación ética con los demás. De tal modo que esos otros no pasan a ser necesariamente enemigos, sino, más bien, estadísticas, circunstancias, obstáculos, factores, detalles desagradables y trabas que estorban. Pero, al mismo tiempo, dejan de ser personas con las que quisiéramos encontrarnos en aras del reconocimiento de la existencia del Otro. (2)
En este escenario orquestado por las formas líquidas del mal, banalización del mal lo había llamado Arendt, proliferan los abusos. Entendemos de modo tradicional que el abuso forma parte de las facultades propias de algunos derechos. Pero se aplica en el sentido de mal uso de un objeto o destino a un fin diferente del que corresponde a su naturaleza. (3)
Así, podemos oír las denuncias sobre abusos: de atribuciones, de autoridad, de economía, en instituciones educativas, contra los derechos fundamentales, sexuales, contra menores, por sustancias que anulan la voluntad, de género, de minoría, de mayoría, de exclusión, de consumo de sustancias…En fin, el inventario se puede extender grandemente. Desde el psicoanálisis no dejamos de reconocer lo necesario y justo que desde la disciplina jurídica, educativa, médica, entre otras, se realiza para sancionar y rectificar el daño causado por los abusos.
Por tanto, es nuestro interés en estas II Jornadas de Escuela, precisar la perspectiva del psicoanálisis en el entramado pulsional del abuso. Tomamos como punto de partida la referencia de 1919 cuando Freud nombra la reticencia que presentaban sus pacientes para hablar de eventos infantiles, sobre todo uno en especial había sufrido un borramiento, lo único que de él podía sobrevivir por efecto del tratamiento era la anodina frase “pegan a un niño”.
La estructura del abuso en Freud sigue la construcción de una gramática fantasmática pero Lacan puso el acento sobre su lógica. Por eso, el valor de la expresión lógica del fantasma surge de no haber dicho gramática del fantasma.
La frase del fantasma fundamental en lógica se llama axioma y se dirá también que hay una estática del fantasma, esto es, que hay un lugar fijo para el sujeto, un lugar peculiar, escondido, que puede parecer ridículo pero atravesado por el instante de ver. El fantasma, dirá Miller, es como un acordeón: puede cubrir toda la vida del sujeto y ser, al mismo tiempo, la cosa más oculta y más atómica del mundo. (4)
Podemos, en primer lugar, considerar la existencia de una vergüenza del fantasma. Al neurótico, por lo general su fantasma lo avergüenza, porque se le presenta en contradicción con sus valores morales, en este primer nivel inmediato de la experiencia se manifiesta la división del sujeto.
Sabemos también, que para el sujeto psicótico, el otro prontamente se convierte en otro abusador y que el sujeto perverso es aquel que sabe cómo hacer gozar.
Entonces, la idea freudiana de que el fantasma permite al sujeto obtener placer, corresponde a la hipótesis lacaniana en la que el fantasma es como una máquina para transformar el goce en placer.
El abuso implica ir más allá del deseo y del fantasma, hacia hacer del otro un objeto: niño, mujer, partenaire. La subjetividad de éste se ve amenazada por la voluntad de goce del Amo/agresor (partenaire, agente, maestro, las diferentes formas que toma el agresor en la actualidad). A menudo, es el cuerpo el que es puesto en juego en el abuso: castigos, violación, maltrato, hasta el crimen.
En la época del Otro que no existe hay malestar en la cultura avivado por un empuje a ir más allá del placer, lo que hay más allá, bien sabemos es una dimensión de goce y el fantasma aparece, como un medio para articularlo al placer y hacerlo propio para el deseo.
De este modo, podemos decir que en el malestar actual, los abusos se denuncian, existe toda una plataforma y ruta que los acompañan sin que por ello se sepa algo de la substancia constitutiva referida al goce, sobre todo porque se trata de un goce inédito para el propio sujeto.
Esperamos que estas Jornadas nos permitan un intercambio y pronunciamientos esclarecedores.
Invitamos animadamente a todos aquellos interesados en la situación.
Notas
1-Laurent. E. Ciudades Analíticas, Tres Haches, Argentina, 2004
2-Baumann Z. Donsky L. Maldad líquida, pág. 49, Paidós, Colombia, 20109
3-RAE
4-Miller. J A. Dos dimensiones clínicas: Síntoma y Fantasma, Ediciones Manantial, Argentina, 2010
EJES TEMÁTICOS
1. El abuso y lo imposible de gobernar
Coordinador: Antonio Aguirre Fuentes
E-mail: antoni.guirre.f@gmail.com
Los abusos de un régimen proceden del encuentro con lo imposible de gobernar. No hay saber que funcione. Entonces se actúa. Tenemos regímenes abusadores y tenemos los que sufren de este abuso. También hay los que provocan el desborde violento del régimen, los provocadores inconscientes. ¿Cómo salir de este ciclo fantasmático de goce?
2. El abuso y lo imposible de educar
Coordinadora: Mónica Febres Cordero de Espinel
E-mail: febrescorderomonica@gmail.com
La educación impone criterios de eficacia, adaptación y productividad y, desde sus imperativos, amenaza con borrar las diferencias subjetivas entre los alumnos. A esto se pueden sumar las expectativas venidas de “ideales delirantes” de los padres, como dice Eric Laurent, y el niño o el adolescente se encuentra en situaciones cuyas salidas son el fracaso escolar, la violencia o el acting out. El psicoanálisis propone considerar la singularidad en oposición a un ideal válido para todos, lo que permite a cada sujeto hablar sobre lo que se juega en su vida.
3. El abuso y lo imposible de psicoanalizar
Coordinadora: Piedad Ortega de Spurrier
E-mail: piedadspurrier@hotmail.com
El psicoanálisis nos plantea que el sujeto siempre se defiende. La experiencia analítica nos muestra cómo cada uno ha construido diversas modalidades sintomáticas y fantasmáticas para hacer frente al goce que irrumpe de forma traumática. El sujeto es en sí, una defensa frente al goce. Podemos encontrar las afinidades posibles entre el goce y el abuso en sus diversas declinaciones: abuso de una posición dominante, de superioridad, de confianza, etc.
En consecuencia, el sujeto, el síntoma y el fantasma constituyen modos de tratamiento al goce. Si el síntoma es en apariencia liviano e ingenioso, no deja de estar impregnado de la fijeza fantasmática de tal forma que el deseo se torna repetitivo, monótono y flojo. ¿Erradicar el síntoma? ¿Educarlo? ¿Medicalizarlo? La respuesta del psicoanálisis es otra, ni curarlo todo, ni erradicarlo. Más vale se trata de transformarlo para pasar del síntoma como disfuncionamiento al síntoma cómo funcionamiento, única forma de tratamiento de lo real incurable de la libido.
- Requisitos para la presentación de trabajos
Los trabajos serán receptados hasta el 8 de septiembre del 2019.
No deben sobrepasar los 5000 caracteres con espacios.
Pueden presentar trabajos: Miembros, Asociados, Cartelizantes, Grupos de investigación declarados a la sede y participantes de TRAZOS.
Los trabajos deben llevar en su encabezado: nombre, modalidad de inscripción en la Escuela y eje en el que participa.
Enviar los trabajos al coordinador del eje seleccionado con copia a la Comisión Científica y a la NEL Guayaquil: - Comisión Científica:
• Piedad Ortega de Spurrier: piedadspurrier@hotmail.com
• Mónica Febres Cordero de Espinel: febrescorderomonica@gmail.com
• Mayra de Hanze: malaquita32@hotmail.com
NEL Guayaquil: nelquil@gmail.com